«Glosa del beso» (Glosa I) de Rafael Galindo (Poema)

Sólo falta una caricia

Que de tu amor me haga preso,

Para estrechar nuestros labios

Y fundirnos en un beso.

I

Primero fue la mirada

de tus ojos acuciosos,

que expresivos y curiosos

en mi alma hicieron morada.

Fue como dulce cascada

que me inundó sin malicia.

Es tu amor una delicia

y, puedes darlo por hecho,

que entre tu pecho y mi pecho

SÓLO FALTA UNA CARICIA.

II

Entonces nos acercamos

mirándonos fijamente,

y estando ya, frente a frente,

de la mano nos tomamos.

Por poco nos tropezamos,

¡Qué intenso aquel embeleso!

Por el destino travieso

que nos puso tan cerquita,

falta sólo una chispita

QUE DE TU AMOR ME HAGA PRESO.

III

Apenas si respiraba,

tú, suspirabas muy lento,

y como un cálido viento

nuestro aliento se cruzaba.

Ya sólo nos separaba

aroma de pintalabios.

Por eso es que sin resabios

y con la sangre caliente,

un abrazo es pertinente

PARA ESTRECHAR NUESTROS LABIOS.

IV

Te tomé por la cintura,

me tomaste por el cuello,

y en ese instante tan bello

fuiste mi fruta madura.

¡Se desató una locura

como de orate poseso!

Así comenzó el proceso

de beber tu fuego ardiente,

para amarnos ciegamente

Y FUNDIRNOS EN UN BESO.